Con el paso de los años nuestros hijos, esos pequeñajos que no paraban quietos un instante, terminan creciendo y se hacen mayores. Un hecho irremediable propio de la vida que lleva consigo una serie de cambios que van más allá de los meramente fisiológicos. En el ámbito del hogar, el paso de la infancia a la adolescencia de los hijos juega también un papel destacado no pasando este desapercibido. Seguramente hemos empezado a notar ese cambio en los niños y nos hemos dado cuenta de que, por ejemplo, cosas que antes le eran de utilidad ahora ya no cumplen su función. Una de las estancias del hogar en donde este cambio de etapa tiene un mayor protagonismo es en su propio dormitorio. Pasar de una habitación infantil a un dormitorio juvenil no siempre es fácil y deberemos estar preparados para cuando algo así suceda en nuestra casa.
En un determinado momento nos encontramos en la situación de que nuestros hijos han crecido y nos piden un dormitorio más acorde a sus nuevas necesidades y situación. Un hecho que nos obliga a tener que replantear la propia estancia en sí y que, en ocasiones, nos sobrepasa pues no sabemos cómo llevar a cabo esta transición. Por suerte contamos con la ayuda de Muemue, una tienda online especializada en muebles y decoración infantil y juvenil, que nos ayudará a hacer el paso de una habitación infantil a otra más juvenil.
Contenidos:
Consejos para pasar de una habitación infantil a otra juvenil
Replantear la distribución de la habitación, hacer cambios en la mueblería o la propia decoración, así como, permitir a los niños que participen activamente en el que será su nuevo espacio, son algunas de las cosas que deberemos tener en cuenta en el paso de un dormitorio infantil a otro juvenil. Dicho esto, a continuación te ofrecemos una serie de consejos que seguro te serán de gran utilidad para hacer este cambio con éxito.
La nueva distribución es la clave
A la hora de replantear la nueva estancia debemos tener presente que el orden y armonía de un dormitorio juvenil no es el mismo que el de una habitación infantil. Eso significa que para empezar debemos hacer una modificación general en la distribución del propio dormitorio para adaptarlo a la nueva etapa. Por ejemplo, podemos aprovechar la zona de juegos de la habitación de nuestros hijos, ya en desuso desde hace unos años, para convertirla en un rincón de estudios en donde estos puedan hacer sus tareas escolares. Aunque el cambio no queda solo en eso, por ello, lo mejor para acertar con la distribución es hacer partícipes a los niños para que estos puedan aportar sus propias ideas.
El orden es también muy importante
Aunque recordamos la adolescencia como una etapa de cierta rebeldía y caos, en cuanto a su habitación se refiere, esta debe reflejar justo todo lo contrario. Por eso, una buena idea en este sentido es aprovechar al máximo su espacio para que todo esté en su sitio y perfectamente ordenado. Utiliza para ello mobiliario funcional que cumpla su función pero que a la vez sirva como lugar de almacenaje. Por ejemplo, las camas nido juveniles son un gran acierto en este sentido pues nos ofrecen una gran superficie para guardar todo tipo de cosas de los niños. Lo mismo ocurre con las cajas decorativas, cestos, canastos, …
Apuesta por una decoración moderna
La decoración es uno de los elementos que mayor cambio experimentan entre la transición de un dormitorio infantil a otro juvenil. Seguramente los peluches, juguetes y decoración en tonos pastel que tanto protagonismo tenían en su infancia han dado paso a otro tipo de inquietudes más acordes a su edad. Lo más común es que los niños hagan ciertos cambios en su habitación para intentar mostrar parte de su mundo interior. Hobbies, deportes o gustos musicales son algunos de los temas que más suelen predominar entre la decoración juvenil. Una vez más te animamos a que les dejes a tus hijos cierta libertad para que estos puedan explorar todas las posibilidades que ofrece la decoración pero sin sobrepasarse.
La iluminación juega un papel destacado
En cuanto a los puntos de luz se refiere, estos también experimentan una serie de cambios entre el paso de un dormitorio infantil a otro juvenil. Lo que antes solucionábamos con una o dos luces, ahora se requiere de mucho más para crear un espacio realmente confortable que los niños puedan aprovechar al máximo. En la mesita, zona de estudios o en el techo para iluminar toda la estancia son solo algunos de los puntos en donde esta iluminación no puede faltar. Por suerte, contamos con una gran variedad de opciones en cuanto a iluminación interior se refiere para crear lugares realmente únicos y llenos de estilo.
Los pequeños detalles marcan la diferencia
Como todo en esta vida, los pequeños detalles marcan la diferencia, pudiendo hacer de un espacio aburrido y sin personalidad, una estancia con encanto y llena de vida. En el caso del dormitorio de los niños, la etapa juvenil presenta también una buena oportunidad para replantear por completo el estilo que queremos darle a la propia habitación. Los colores de las paredes, el nuevo mobiliario, así como, la distribución de la que hemos hablado antes, ofrecen un sinfín de combinaciones para crear una habitación de ensueño. En nuestras manos queda ahora hacer de este nuevo cuarto juvenil un sitio lleno de personalidad en el que nuestros hijos puedan llegar a disfrutar y ser ellos mismos.
Esperamos que todos nuestros consejos te sean útiles a la hora de emprender este proyecto ¡Y recuerda! Para un adolescente su habitación es su mundo. No impongas tu criterio, piensa que entre lo que quiere tu hijo y lo que te gusta a ti hay un punto intermedio, podéis disfrutar mucho del proceso si trabajáis en equipo.
¡Nos alegra que te sirva Josué! Feliz verano
😀
Buenas. Me ha gustado el articulo y me habeis dado claridad en la busqueda de muebles para mi hijo que esta pasando de una cama nido a una mas grande. Me han gustado los estilos y encajan perfectamente con lo que busco, saludos